12.9.17

Sólamente una tarde, Milán

Nos damos un paseo por la otra capital de Italia. La que está escondida en la Via Gaspare Spontini. Y no, no sale en el mapa.





La capital de la moda. Algunos pensarán en París, otros en Nueva York, pero esto va de Milán. Una ciudad que sus propios habitantes tratan de cambiar, empezando por ellos mismos. El último lustro le ha sentado muy bien al pulmón industrial italiano, donde querrás trabajar si eres joven y salir de compras si eres humano. 

Pero el tiempo apremia y sólo tenemos unas horas y pocas ganas de andar para verlo todo. El agobiante clima tampoco ayuda. Todo no se puede ver, pero sin moverse de la Stazione Centrale y alrededores podemos disfrutar del mítico aperitivo y acabar saboreando una biblioteca de vinos a ritmo de blues habanero. 




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Miramos nuestro reloj y recordamos que los aperitivi funcionan por las tardes (hasta las 19-20h) y van de pedirse algo de beber y comer sin descanso. Tenemos hambre. A escasos 10 minutos andando desde Centrale, está la Via Gaspare Spontini, que a simple vista no parece si no ofrecernos un poco más de esa estampa de fachada amarillenta y sucia a la que nos acostumbra esta parte de la ciudad. Sin embargo, en el nº 8 no para de titilar un neón donde dice ‘Ciu’s’. Este restaurante de guerrilla propone un aperitivo por 10€ con una generosa variedad de platos, desde pasta hasta berenjenas rellenas y ensaladas, sin tener un sabor exquisito pero con un precio y ambiente imbatibles.

Salimos en busca de un digestivo, de una aguja y un refino. Justo enfrente de Ciu’s emana un olor a Chianti acompañado de un gigantesco contrabajo y unas maracas que agitan a personas y taninos a partes iguales. Una auténtica colección de vinos italianos y mediterráneos, ordenados como enciclopedias donde la gente se apunta a talleres de degustación, música en directo, fuera-pista de copas y, por supuesto, un pulido aperitivo. Los hay que hasta bailan. Se llama ‘Vino al Vino’ y está en el nº 11.

Al pan, pan. Al vino, vino

Y para completar esta travesía, el local inmediatamente al lado de Vino al Vino te ofrece una exquisita nevera de helados artesanales (melocotón, stracciatella, chocolates, mango…). I Gelati di Boccia, para coronar el apetito, en la misma esquina.

Pero quizás el tiempo tiene tanta prisa que no puedes ni salir de la Stazione Centrale y te quieres tomar una buena pizza. La cadena ‘Rossopomodoro’ redefine eso de que las cadenas no ofrecen buen producto. Pizzería 100% napolitana, y como dicen ellos, “sono certamente tutti i colori di Napoli”. Sin sorpresas en la cuenta (10-12€ por pizza) y con una decoración muy de una mamma moderna.

Y nos subimos al tren.

23.8.17

Rumbo a Cabo Verde y Cómo (No) Perderse

Un cóctel de Europa y África con acento y sabor a maní. Los caboverdianos no miran a África, no tienen su guerra, no quieren cosas de negros.





Bueno, amigos, si he tardado tanto en escribir esta entrada no ha sido por otra cosa sino para haceros sentir el verdadero sentido de la vida caboverdiana. Puro ritmo isleño, fica tranquilo, como les gusta decir. Total, que tras dejar esto pasar me he dicho, qué demonios, por qué no haces una buena re-inmersión en tu viaje, ya que estás... Declararé por tanto esta entrada como una mini guía de viajes de bolsillo.

Cabo Verde, ah, ese archipiélago que no se jacta precisamente ni de ser verde ni de pertenecer a ningún rango militar en particular. De hecho, se llama así porque en Senegal (estampo un mapa a continuación) hay un cabo -aquí hablo del accidente geográfico- llamado Verde al que le sigue una línea imaginaria que llega hasta el archipiélago que nos ocupa. Ahora, para desgracia de los amantes de la etimología y de los finales felices, el cabo Verde de Senegal ha sido tomado por un complejo hotelero francés. El yugo del hombre blanco en África, ya sabéis.


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Casi 700km separan las islas de Cabo Verde del cabo Verde de Senegal (flecha roja)

Me desvío, disculpadme. Cabo Verde. Las islas de Cabo Verde. Sabéis, si tuviera que definirlas sería algo así como un cóctel de Europa y África con acento y sabor a maní. Los caboverdianos no miran a África, no tienen su guerra, no quieren cosas de negros. Prefieren el euro y el dólar. Conocieron la riqueza y ahora la pobreza. Pero tranquilos, no es ni mucho menos un sitio peligroso sino todo lo contrario.

Paisajísticamente hablando, han sido torturadas con aridez y mucha arena. De las 9 islas habitadas, 6 son pura arena de playa y paisajes lunares salpicadas de volcanes. Yo os voy a hablar de las que visité (y creo que son las que más van a disfrutar los que no vayan buscando única y exclusivamente playa), pero le voy a poner un eslogan a otras islas de las que oiréis hablar bastante, por si os pica el gusanillo:


Islas de Barlovento (norte):

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  • Santo Antao: la isla verde por excelencia, la que se quedó los valles, las terrazas verticales, las cañas de azúcar y el grogue
  • Sao Vicente: la isla del viento y capital cultural de CV
  • Sal: arena, aguas turquesas y todo incluído.


Ilhas do Sotavento:


  • Sao Tiago (Santiago para los amigos) y su capital, Praia: la 'gran' urbe de Cabo Verde, sus ladroncillos callejeros y sus playas turísticas
  • Fogo: alberga un volcán en su interior, que entró en erupción por última vez hace algo menos de un lustro

Cabo Verde es más que playas y arenas fina

Fui con dos amigos a la isla, en busca principalmente de buen rollo y naturaleza. Tras comprobar que los vuelos internos no son lo que se dice baratos y que el barco tarda demasiado para los días que fuimos (9 en total), nos centramos en las islas de Sao Vicente y Santo Antao, la isla cultural y la isla verde, respectivamente.
Este tándem te permite pasar unos días en Mindelo, la capital de Sao Vicente, con bares de música en directo, restaurantes en el paseo marítimo (pero sin lujos) y un mercado de peces muy famoso.


Cómo Llegar


La eterna duda: "Pero... ¿Cabo Verde no está muy lejos?" No tanto. Casi todos los vuelos, por no decir todos, pasan por Lisboa antes de llegar a CV. Desde Lisboa son 3 horas de vuelo.
Las dos principales aerolíneas con TACV (aerolíneas de Cabo Verde, en la que fuimos. Muy correcto todo el viaje. Precios desde 250€ i/v) y TAP (aerolínea nacional portuguesa y normalmente más cara).

Como alternativa al vuelo de escala, y dependiendo de la ciudad de origen, puede resultar mucho más económico llegar a Lisboa en coche y aprovechar también algunos días en la capital portuguesa.
Dejar el coche en el aeropuerto de Lisboa (easyParking) son 4/5€ al día, muy barato y hay muchos parkings por el estilo.

Alojamiento


Para sorpresa del viajero occidental, la oferta de Airbnb es muy amplia y barata, y permite entrar en contacto con gente local muy fácilmente.
En Mindelo estuvimos en un apartamento bastante normalito, pero si cruzáis a Santo Antao (os obligo a cruzar, de hecho), tenéis que quedaros en Casa das Ilhas en pleno corazón del valle de Paúl y con unas magníficas vistas.


Valle de Paúl, isla de Santo Antao

Música


Inglaterra tiene a sus Beatles, Bélgica a su Jacques Brel, Canadá a Justin Bieber... y Cabo Verde a Cesária Évora, la reina del 'fado caboverdiano' y extremadamente querida/idolatrada en el país. No os voy a engañar, no es una fiesta pero tiena esa morabeza caboverdiana que muchos habitantes te intentan transmitir: cantar para recordar al que se ha ido de su tierra.


Dejando a un lado a Cesária, el esqueleto lo váis a mover pero bien. El ritmo africano es contagioso y sobre todo, muy natural. En las islas más turísticas (Sal, Boa Vista, Sao Tiago) hay más oferta de discoteca. En Mindelo (isla de Sao Vicente) prima el reggae.


Y por supuesto no puede faltar la banda sonora de la África lusófona, "Mama África": https://www.youtube.com/watch?v=biToOIyr2QU.


Puerto de Mindelo, Sao Vicente

Miscelánea


  • Desconocía la combinación de montaña y alcoholismo, pero os cruzaréis con curiosas personas a lomos de su burro, borrachos como una cuba por el grogue, el licor típico de Cabo Verde. Es algo así como la cachaça caboverdiana, hecha a base de caña de azucar.
  • No os asustéis si al pasar por alguna casa, sale un olor (cheiro en portugués) muy rico y al acercaros, salen de casa y os invitan a comer. Sin miedo, entrad y dejaos acoger por esta gente tan increíble.
  • El culto al cuerpo es una realidad en estas islas. No son pocos los gimnasios improvisados que plagan playas y calles. Un lujo para la vista de ellas... y de ellos.
  • Siempre que viajo suelo acudir a blogs tipo El Viajero de El País (este artículo y este otro) y me veo los episodios correspondientes de Madrileños/Españoles por el Mundo. Siempre se aprende algo que no viene en las guías de viajes.
  • De todas las guías de viaje de Cabo Verde en castellano, la Guía Azul es la más completa y actualizada.

Pintada en la ciudad de Mindelo, Sao Vicente: "y aún siguen diciendo que somos seres inteligentes"

16.8.17

8 cosas que no sabías de las islas Azores y los azorianos

Las islas Azores están llamadas a ser el nuevo destino vacacional de europeos y americanos. Crece el interés y, con él, se destapan algunas curiosidades de estas exóticas islas.


Una de las cascadas de Fajã Grande, isla de Flores

1. El ukelele no es de origen hawaiano, sino azoriano


El cavaquinho portugués es un instrumento, parecido a la guitarra pero de menor tamaño, que consta de 4 cuerdas y que escuchamos siempre en música brasileña (samba, principalmente) y caboverdiana. Como curiosidad, su nombre significa "palique" en castellano, ya que no deja de sonar en toda la canción. Su introducción en Hawaii y la Polinesia se produjo con la llegada de la gran emigración azoriana en la década de 1880. Logró una gran acogida local, ya que se trataba del primer instrumento de cuerda que vieron en estas islas, y se adaptó para dar lugar al ukelele que hoy conocemos.

2. A medio camino entre Europa y América


Aunque estamos hablando de un archipiélago de 9 islas distribuidas a lo largo de más de 600 km, la preciosa isla de Flores presume de ser el territorio europeo más occidental. De hecho, tanto esta isla como la de Corvo, forman parte de la placa tectónica de América del Norte. Desde Lisboa tardaríamos 3 horas en llegar a Flores en avión y 6 horas en llegar hasta la ciudad norteamericana de Providence, Massachusetts.

3. ¿Por qué escuchamos tanto inglés-americano en la isla?



Pobres en pertenencias pero muy ricos en tradición, muchos emigrantes azorianos vuelven a las islas al llegar a la jubilación y no son pocas las familias de 2ª y 3ª generiaciones que pasan el verano con sus hijos para enseñarles sus lugares de origen.
Imprescindible la visita al Museu da Emigração Açoreana de Ribeira Grande (isla de São Miguel) si queréis ahondar más en la Historia de las islas.
Históricamente, los azorianos se han visto forzados en numerosas ocasiones a buscar nuevas oportunidades y muchas veces refugio (erupciones en la isla de Faial a finales de los 50) en países tan diverson como Brasil, Canadá o Estados Unidos. Éste último, particularmente por su cercanía a las islas, ha sido destino favorito de cerca de la mitad de las emigraciones azorianas desde principios del siglo XIX. Muchos se enrolaron en los balleneros que paraban en las islas y acabaron en Hawaii y la costa Este (Providence y Boston principalmente). La fiebre del oro de finales del XIX y el Azorean Refugee Act que promulgó el presidente Kennedy tras la catástrofe de Faial, facilitaron a más de 175,000 azorianos la búsqueda del american dream en el Estado de California.

Es más, algunas celebridades norteamericanas mundialmente conocidas tienen ascendecia azoriana: Tom Hanks (bisnieto de azorianos), Nelly Furtado (hija de azorianos), James Franco, Nuno Bettancourt (guitarrista del grupo Extreme) o Katy Perry (descendiente de azorianos por parte materna).



La temperatura del agua cambia según el nivel de la marea en esta playa de Ferreria, en São Miguel


4. En Azores no hay playas de arena blanca... ¿o sí?


No nos engañemos: el clima de Azores puede sorprenderte con una niebla impenetrable de por la mañana, un sol espléndido a mediodía y lluvia para merendar. Además, todas las islas tienen origen volcánico y por tanto no es el destino de arenas blancas y aguas caribeñas que muchos creen encontrar aquí. La excepción es la isla de Santa María, que siendo la más antigua en cuanto a formación geológica se refiere, tiene en sus costas rarezas como la playa de Formosa.
La mayoría de las playas son piscinas naturales o pequeños refugios acondicionados para el baño, siempre en roca.

5. Sin miedo a beber agua del grifo


A pesar de su insularidad (y también de lo acostumbrados que estamos los españoles a la poco sabrosa agua de Baleares o Canarias), el agua de grifo de Azores no sólo es potable si no que su consumo está respaldado por el propio Estado.

6. ¡Están plagadas de hortensias!


El sueño de cualquier madre con un trocito de jardín en España: la hortensia. Necesitada de mucha humedad, en Azores nacen en colinas, playas y acantilados. Cualquier lugar es bueno. A la isla de Faial se la conoce como Isla Azul por el color de sus hortensias.


7. Escala de ballenas... y balleneros


Un tercio de los cetáceos que existen en el mundo pasan o están entorno a las islas Azores, lo que convierte al archipiélago en uno de los mejores puntos del planeta para la observación, entre otras especies, de ballenas. Hasta su prohibición en 1986, la caza de ballenas fue uno de los motores económicos de las Azores, no tanto por el género en sí como por convertirse en un paso obligado de balleneros de todo el mundo. Asimismo, balleneros estadounidenses y canadienses se frotaban las aletas al ver cómo miles de azorianos se enrolaban en sus barcos, buscando una mejor vida en los puertos de destino, a cambio de una ridícula manutención a bordo.
Las islas con posiciones más privilegiadas para el avistamiento de ballenas y delfines son las de São Miguel, Santa Maria, Faial y Pico. En la isla de Flores existe un museo dedicado a las ballenas, de visita obligada. 

Chá de Gorreana. Ríete tú del té de Ceilán.


8. Invernaderos de piñas, plantaciones de té y buen vino


Con la desaparición de la naranja a finales del siglo XVIII, se buscaron nuevos usos a los desusados terrenos de cultivo. Así, la adinerada familia Arruda aprovechó la fértil tierra de São Miguel y la cercanía de Brasil para convinarlos en invernaderos de dos aguas y pintados  de blanco para generar una humedad similar a las de las latitudes donde crecía de forma natural la piña. Presente en la geografía y gastronomía azoriana, vale la pena desviarse hacia las afueras de Ponta Delgada para visitar la primera (y aún en funcionamiento) plantación de piñas. Sin coste de admisión, podrás entrar en los invernaderos, recorrer el antiguo casón de la familia y probar los deliciosos sumos de ananás.

No sólo hay en China y en India. Las plantaciones de Porto Formoso y Gorreana, en la isla de São Miguel, se jactan de ser las únicas plantaciones de té de Europa. Ambas fábricas pueden visitarse, probar gratis sus suaves chá verde (té verde) y chá preto (té negro) y recorrer sus laberínticos paisajes con espectaculares vistas al mar.


A una gastronomía tan variada y rica como la azoriana no podía faltarle la compañía de los taninos. Con denominación de origen propia, los viñedos de la isla de Pico son, desde 2004, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y no sólo por su entorno de tierras volcánicas y negruzcas. El sabor de su vino se hace eco en cualquier restaurante que visitemos, junto con botellas de otras islas como Graciosa, Terceira o São Miguel.



Plantación de piñas en A.Arruda, Ponta Delgada, São Miguel

2.5.17

La Alpujarra granadina se escribe con 'z' de zol


Pueblos en las alturas, chocolate y agua de manantial aparecen por las montañas de esta desconocida región de Granada.



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"Francia tiene su Provenza, Italia, su Toscana; Granada su Alpujarra"

Vamos bajando por la A-4, rumbo al sol. O al trópico, o a la montaña. Cada día es un escenario de verde y launa que cambia mil veces y que serpentea en las alturas. Antes de llegar no tenía claro si hablábamos de "La Alpujarra" o de "Las Alpujarras". Tampoco de si le decías "alpujarrano", "alpujarrense" o "alpujarreño" a lo que verías o con quien hablaras. Demonios, ¡no sabía ni dónde quedaba La Alpujarra!

Entre Sierra Nevada y el mar, ladera abajo se extiende la comarca de La Alpujarra. Un valle entre el Mulhacén y sus picos y las sierras de Contravisa y Lújar. Las montañas crean un microclima cálido y serrano que le vale el sobrenombre a su terminación en la Costa Tropical. 

Con las cosas muy poco claras pero expectante se cruzó Despeñaperros. No es que no haya nada memorable hasta ahí, que conste. Kilómetros y kilómetros de olivos militarmente ordenados te van introduciendo esa aura de saber que entras en una nueva historia. Jaen, Úbeda, Guarromán... y finalmente esa postal panorámica de la una Alhambra alzada hacia el cielo y Sierra Nevada de guardaespaldas. Una curva perfecta para contemplarlo desde todos los ángulos.

Al pasar la ciudad, las montañas empiezan a seguirte por la izquierda. Casi intimidan. 


Una turista francesa posando para nuestro objetivo, Capileira


No se encuentra estrictamente en La Alpujarra, pero su descubrimiento a la izquierda de la A-44 merece un desvío. El pueblo rematadamente andaluz de Nigüelas tiene calles brillantes, estrechas y serpenteantes. Cuesta no imaginar unos grandes tendederos con sábanas blancas y frescas ondeando al viento.
Si es una parada para tomar algo, buenas noticias: "El Rincón de Miguel" te espera literalmente en la entrada del pueblo, al lado del parking gratuito del pueblo. Si es para sentarse bien en la mesa, "La Lolaina" es un restaurante ecológico con unos dueños muy majos y dedicados.Tienen una de las terrazas más bonitas que recuerdo del viaje (y no son pocas).
El pueblo está a pies de la Falla de Nigüelas, un derramamiento impresionante de montaña que puede recorrerse a pie (hay rutas a partir de 7km en Wikiloc).

La Alpujarra

Las puertas de la Alpajurra.Nos la hemos bebido todos. Y tiene un pueblo que reposa a tiro de piedra del nacimiento de, sí, el río que lleva el agua del mismo nombre. Pero no baja embotellada. En su lugar hay fuentes repartidas por todo el pueblo. Tienen doble chorro que son nada más y nada menos que agua Lanjarón y agua con gas, natural de la naturaleza, y con un ligero sabor a hierro.
Además del agua, la miel, el esparto y el mimbre son otras habilidades locales en las que no cuesta detenerse.

Todos hemos bebido alguna vez Lanjarón. Lanjarón embotellada.



Pampaneira y Capileira, 1h30 desde Granada

Subiendo por las faldas del Mulhacén están los pueblos de Bubión, Pampaneira y Capileira. Combinan rutas a pie con unos pueblos auténticamente alpujarreños. Los terraos (techos planos) de las casas blancas aparecen como escalones incrustados en la montaña. Por eso las vistas que tienen todas las casas compensa el clima de montaña, 1200-1400m, que se deja notar en el verde y en la temperatura.
Estos pueblos que suenan a samba forman parte de la Alpujarra Alta. La altura lo dice todo: Capileira está a más de 1400m. Sus características casas son patrimonio nacional, pero ante todo, representan un viaje en el tiempo y en la montaña.

Pampaneira
Es el primero de los dos, el que da la bienvenida a esta parte alta y encajonada de la comarca. Algunas de sus calles están divididas por canales por los que van bajando las aguas del deshielo.
Son tan estrechos que no es posible atravesarlos con el coche, por lo que hay que prepararse para las cuestas.

Capileira
Se encuentra en lo más alto de
El cercano pueblo de Bubión está a tan sólo 2 kilómetros, y hay un sendero muy bonito que lo separa de Capileira. Viene indicado y señalizado.

Vista desde la A-4132, rumbo a Pampaneira
Dónde alojarse

Cualquier alojamiento en los alrededorse de Órgiva, la población más grande y casi centrada en medio de La Alpujarra, es una buena opción como 'centro de operaciones'. Hay hoteles y airbnbs desde €35 la noche por persona. El pueblo no es gran cosa, pero encontrarás casitas y hostales rurales en el mismo campo, desperdigadas por los alrededores de Órgiva.

El balneario de Lanjarón aparece nada más entrar en la comarca alpujarreña, en Lanjarón. Su atractivo es su circuito de aguas, incluido en el precio estándar en los meses de primavera: dos personas por €130 la noche. Es un hotel cuidado y con un caminito hacia una piscina y campo de fútbol mirando al valle, propiedad del hotel. Una buena opción si se busca un último día de relax antes de volver a la vida real.

Para los más aventureros, arriba, a 2500m os espera el Refugio Poqueira, en lo alto del mismo barranco de Poqueira, que termina en Pampaneira. Punto estratégico para aquellos que se animen a subir el Mulhacén. Hacia el sur se abre un gran vacío de valles que al fondo chocan con Sierra Lujar, el Mediterráneo y el norte de África, que se divisa desde la puerta del refugio.

Dónde y qué comer

Todo es apetecible en esta zona de Granada. Y sobre todo muy variado: carnes y embutidos, chocolate, quesos, vino...
El choto es el plato más típico en el apartado de carnes: cordero de lechal bañado en salsa de almendras, ajo y vino. Abunda el bacalao, para los marítimos.

En la 'capital' de La Alpujarra, Órgiva, sobrevive un rincón atípico donde no hacen nada mal las pizzas (da igual la combinación de ingredientes. La pizza"Alpujarreña" si alguna vez te habías imaginado una pizza de  jamón, morcilla, chorizo, patatas y huevo. Más vale reservar en "La Almazara" , sobre todo si está abierta su terraza. Platos desde 9€, pizzas desde 11€.

Que uno de los reclamos gastronómicos de La Alpujarra sea el chocolate, es algo que a todos sorprende. La Fábrica de Chocolate Abuela Ili es en parte responsable de este delicioso descubrimiento. La, verdaderamente, abuela Ili dejó a sus herederos expandir a 4 establecimientos y aumentar su producción en cada una de sus tienda-fábrica, una de ellos en Pampaneira. Delicioso el de chocolate blanco con pimienta y el de chocolate con plátano.


Algunas curiosidades

Hay tantas teorías sobre por qué Capuleira y Pampaneira tienen esos nombres tan ‘portugueses’ o gallegos, que cada uno que crea lo que quiera. Recomiendo leer este curioso foro.

"El pueblo más alto de España", reza en un letreto en Trevélez (1.476m). Este pueblo agarrado a las faldas del Mulhacén lleva décadas engañando a todos los españoles, ya que no es el pueblo más alto de España a pesar de estar en la misma montañana cuyo pico es el más alto de la Península. Realmente es Valdelinares, en Teruel (1692m).

Te cruzarás con muchos ingleses. Aún sigo investigando por qué, pero abundan en La Alpujarra. Hablando de ingleses: el escritor escribió en 1957 "Al Sur de Granada", que luego llevaron al cine Verónica Sánchez ('Los Serrano'), Antonio Resines ('Amanece que no es poco') y Guillermo Toledo ('El Otro Lado de la Cama'). El arquitecto australiano Donald Gray se viene declarando ya desde algunos años, un defensor de la construcción y estética alpujerreña. Un tipo sin pelos en la lengua, algo así como el Risto Mejide de la arquitectura Alpujarreña.

En el siglo XVI, apenas cien años tras el fin de la Reconquista, se produjo la llamada Rebelión de las Alpujarras, considerada la guerra más salvaje de las que hubo en Europa en ese siglo. La población morisca se alzó frente a un Decreto Real que limitaba sus libertades culturales, y desencadenó en un conflicto armado de 3 años de duración. Acabó con la reubicación de los moriscos que sobrevivieron entre toda la geografía española. Su deportación supuso un duro golpe para la economía del Reino de Granada y fue la antesala de la expulsión total de los moriscos, tres décadas después (1609).

Mapa de la ruta propuesta (click para ampliar):






30.1.17

Ir al aeopuerto de Adolfo Suárez Madrid Barajas en Uber por sólo 15€

Desde el pasado 26 de enero y hasta mediados de abril, la línea 8 de Madrid que lleva al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid Barajas estará cerrada al público. Y es el momento perfecto para utilizar servicios alternativos.

En este caso, la propuesta de Uber es la más barata y competitiva. Mientras un taxi te cobra 30€ si vas al aeropuerto de Adolfo Suárez Madrid Barajas, cogiéndolo desde dentro de la M-30, hasta el 8 de febrero podrás ir y volver con Uber por sólo 15€ el trayecto (tarifa fija).

¿Cómo activar el servicio?
 
Desde el interior de la M-30 al Aeropuerto
  1. Abre tu app de Uber (puedes programar la solicitud de tu viaje desde dentro M-30)
  2. Introduce el código promocional madridairport
  3. Introduce a la terminal a la que viajas
  4. Pide la nueva opción UberAIRPORT
Desde el Aeropuerto al interior de la M-30
  1. Abre tu app de Uber
  2. Introduce el código promocional madridairport (si ya lo has introducido antes no es necesario)
  3. Selecciona la terminal a la que viajas o desde la que sales
  4. Pide la nueva opción UberAIRPORT

¿Aún no tienes Uber? ¿Que aún no sabes cómo conseguir 5€ por la cara?
Aquí puedes hacerte con una + 5€ para tu primer viaje: https://get.uber.com/invite/19ha8.
Si ya tienes la app bajada, pero aún no has hecho ningún viaje, también puedes los 5 € con meter el código 19ha8 en la sección de métodos de pago.